El mundo de Disneyland Paris es literalmente mágico y perfectamente diseñado para el consumo devorador de pequeños y grandes.
Es una Ciudad donde el Coorporativo de Disney creó estratégicamente un mundo de consumo garantizado, enmarcado en la diversión, la alimentación, el ocio, la compra, el transporte y el descanso en sus hoteles.
Existe hasta un tren que va y viene directo a la Ciudad de Paris.
La diversión inicia desde las primeras horas del día hasta las 8 de la noche, apróximadamente.
La gente compra la marca que es Disneyland y que es una marca asociada a aquellos grandes personajes de las caricaturas como Mickey Mouse, Minnie Mouse, Winnie the Pooh, Pluto, Blanca Nieves, Las Princesas, etc, etc.
También habitan en ese mundo todos aquellos personajes de las pelis más nuevas que produce Disney: Los Piratas del Caribe y el Hombre Araña.
No hay niño que no convenza a sus padres para que les compren alguno de tantos miles de objetos de sus personajes favoritos. Nadie se resiste, tampoco los mayores. Ni yo.
Los precios son de los más caros en el mundo. Por ejemplo: Si algo cuesta en Madrid un euro, en el Disneyland Paris te cuesta el triple o más, cualquier cosa. La comida ni se diga.
Sin embargo, la diversión está garantizada y hay que ir dispuestos a gastar los zapatos para conocer todo ese mundo mágico de Disney, claro, no olvidarse de llevar mucha pasta, mucha plata o mucha lana, o al menos lo "suficiente" para no quedar con traumas.
Para más información consultar el portal: www.disneylandparis.com
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